La Catedral de Salta es uno de los edificios más importantes de la ciudad. Conozca todos los detalles de su historia, su arquitectura, sus imágenes y monumentos.
El primer día de la fundación se asignaron los solares para la construcción de los edificios más importantes, entre ellos la llamada “Iglesia Matriz” y la casa parroquial, a la que le tocó la manzana norte de la plaza.
La iglesia que se ve actualmente fue precedida por al menos tres construcciones. La primera fue seguramente muy sencilla, como correspondía a la época y a la situación de la colonia en esos momentos. Tendría paredes de adobe y pocas aberturas. No contaba con campanas ni con figuras importantes.
Dada la precariedad de la construcción este primer edificio se deterioró rápidamente, por lo que le siguió la construcción de un segundo, prácticamente en el mismo lugar que el primero. De acuerdo con los relatos de la época se sabe que este segundo templo tenía dos torres y una cúpula en el centro.
Esta iglesia fue la que soportó el terremoto del 13 de septiembre de 1692, una fecha clave en la historia de Nuestro Señor y Virgen del Milagro. Los movimientos sísmicos provocaron la caída pero no la rotura de una imagen de la Virgen, correspondiente a la Inmaculada Concepción de María, que se hallaba en una de las torres. Esto fue interpretado como una primera señal de “una secreta advertencia de Dios”. En ese momento los padres jesuitas recordaron que una imagen del Santo Cristo estaba guardado en la sacristía desde hacía más de 100 años, sin haber sido expuesta nunca.
En ese momento, la imagen fue colocada frente a la Iglesia que la Compañía de Jesús tenía en el centro de la ciudad, frente a la plaza principal, a pocos metros de donde se encontraba la imagen de la virgen que se había salvado del terremoto. A partir de allí la tierra dejó de temblar. Desde ese momento los salteños renuevan todos los años, en las celebraciones patronales del 15 de septiembre, las manifestaciones de fe hacia el Señor y Virgen del Milagro.
La iglesia actual se comenzó a construir en 1858 y se terminó, después de varias idas y venidas, en 1883.
El estilo arquitectónico es neocolonial, de corriente italianizante, tiene una planta rectangular con tres naves, un presbiterio y un ábside semicircular que contiene el altar mayor. El crucero es muy alto, con una cúpula central. Las naves laterales dejan pasar la luz natural a través de vitraux. El portal de acceso es barroco.
En la Catedral se venera la imagen de Cristo Crucificado (Señor del Milagro) y también se encuentra el Panteón de las Glorias del Norte, donde se guardan los restos de Martín Miguel de Güemes, Álvarez de Arenales y Rudesindo Alvarado.
