Cataratas del Iguazú, agua y magia
Imponentes y conmovedoras, las Cataratas del Iguazú, en el noreste argentino, ofrecen una de esas experiencias que marcan para siempre. Rodeadas de selva subtropical, sus saltos caen con una fuerza hipnótica, desbordando belleza, sonido y energía.
El Tour, en detalle
Día 1:
Recepción en el aeropuerto de Puerto Iguazú y traslado al hotel seleccionado. Alojamiento.
Día 2:
Cataratas argentinas:
Una experiencia inmersiva en el corazón de la selva misionera, donde agua,
vegetación y altura se combinan para ofrecer uno de los paisajes más impactantes del mundo.
La salida desde el hotel hacia el Parque Nacional Iguazú es por la mañana. Ya en el parque, el acceso a los principales circuitos se realiza a través del
Tren de la Selva, un sistema ecológico que recorre la espesura y bordea el río. Este tren tiene dos paradas:
Cataratas y Garganta del Diablo. Desde la estación final se accede, a través de una pasarela de
1.000 metros de largo, a los
balcones panorámicos situados justo en el borde del salto más emblemático del parque. El sendero, serpenteante y sin escaleras, atraviesa un paisaje insular de vegetación exuberante.
En la parada Cataratas se accede a dos paseos distintos: el
Superior y el
Inferior. Si bien el orden puede variar, lo habitual es comenzar por el primero. Durante todo el recorrido, un guía especializado acompañará y brindará interpretación sobre la flora, fauna y geografía del lugar.
Paseo Superior Un circuito de
1.100 metros (ida y vuelta), sin escaleras, que se recorre por pasarelas elevadas. Permite observar los saltos principales desde lo alto, con
vistas amplias del delta del río Iguazú y sus islas cubiertas de vegetación. Es el más accesible de los paseos tradicionales.
Paseo Inferior De trazado circular y con
1.200 metros de recorrido total, permite contemplar los saltos desde distintas perspectivas: de frente, desde abajo o incluso a corta distancia. Para quienes lo deseen, se puede
vivir la lluvia del Salto Bossetti. Este circuito también se adentra en la selva, pero incluye
tramos con escaleras: el esfuerzo, una vez completado, equivale a subir un edificio de ocho pisos.
Desde este punto también parte la
Gran Aventura, un safari náutico opcional para quienes quieran sumar adrenalina al día. El grupo se reencuentra más tarde en la entrada del parque.
Almuerzo: habrá tiempo libre para comer. Se puede optar por el
patio de comidas del parque o llevar una vianda.
Día 3:
Cataratas brasileras con Parque de las aves:
Este recorrido es más breve que el del lado argentino, ya que del lado brasileño existe
un único sendero panorámico desde el cual se obtiene una vista frontal y total de las Cataratas.
Desde allí se pueden apreciar la mayoría de los saltos ubicados en territorio argentino, así como una vista lateral de la imponente
Garganta del Diablo. También se observan los cuatro saltos principales del lado brasileño: Benjamín Constant, Deodoro, Floriano y Santa María.
El paseo concluye con una visita al
Parque das Aves, uno de los refugios de fauna más importantes de Brasil, que alberga más de
300 especies de aves originarias de toda América del Sur. En medio de un entorno de
selva preservada, los visitantes recorren
aviarios inmersivos donde tucanes, guacamayos, loros y otras especies exóticas vuelan libremente, permitiendo
una experiencia cercana y respetuosa con la biodiversidad del continente.
Notas importantes: - Incluye una parada para el almuerzo (no incluido).
- Las condiciones de ingreso a Brasil difieren de las de Argentina. Por favor, consulte si necesita visa.
- Es obligatorio llevar
documentación personal válida para realizar los trámites migratorios.
Día 4:
A la hora programada para el vuelo, traslado desde el hotel hasta el aeropuerto. Fin de nuestros servicios.